Jabón elaborado con glicerina,  carbón activado y aceites esenciales.
( Jabón limpiador facial)
 
Producto poroso de origen vegetal que cuenta con la cualidad de poder atrapar distintos compuestos tales como gases, toxinas, productos de desecho o metales pesados. Se sabe que este tipo de carbón se lleva empleando desde el año 1550 a.C. y que sus aplicaciones han sido las de eliminar toxinas tanto de manera interna como externa en el ser humano. 
En este caso en concreto nos hemos querido centrar en los beneficios del carbón activo y, más concretamente, en los beneficios de la limpieza facial con carbón. Si aún no tienes claro todo lo que puede hacer por ti toma nota porque a buen seguro te va a sorprender.
Jabón que es una mascarilla. A lo largo del día nos topamos con numerosos agentes nocivos que hacen que la piel, el órgano más grande que poseemos, se resienta. Aunque pasen desapercibidos todos esos agentes se van acumulando y la piel es la que tiene que cargar con ellos. En ocasiones llegan a hacerse visibles pero, otras tantas, simplemente permanecen ahí acumulándose en el tiempo. Con un jabón a base de carbón activado que se pueda aplicar sobre el rostro lo que se obtiene es una mascarilla que limpia, de manera profunda, la piel.
Luminosidad. Una vez que la piel ha quedado limpia, gracias al carbón activado, el resultado es más que visible y lo que queda es una piel sin residuos que cuenta con una luminosidad única.
Adiós a las pieles grasas. Quienes padecen este tipo de pieles saben que pueden llegar a resultar muy desagradables y que, pese a tener un cuidado constante, no siempre acaba luciendo la piel todo lo bonita que sería deseable. Con el jabón a base de carbón activado esto no será así. Desde la primera aplicación se podrán ver los resultados.
No más espinillas ni puntos negros. El carbón activado lo que hace es, sencillamente, absorber la grasa de manera natural, con tan sólo aplicarlo sobre la piel. De esta manera consigue eliminar toda la suciedad que la piel haya podido acumular para poder lucir una piel resplandeciente en todo momento.
Las toxinas, los agentes químicos y las bacterias tampoco tienen lugar. Sí, así de poderoso es el carbón activado. Simplemente hay que aplicarlo, dejarlo actuar y aclarar con abundante agua. El jabón se encargará de hacer el resto.